miércoles, 13 de mayo de 2020

Co-ponencia 3 (Alejandra Montenegro)


Antes de dar espacio a mis reflexiones con respecto a la ponencia de Tania, debo admitir lo paralelamente preocupante que me ha parecido las incidencias de estas hegemonías de la visión que hemos intentando comprender en su funcionamiento y sus modelos epistemológicos de acción tan criticados por Haraway, con respecto a la Pandemia que acontece en la actualidad.  Básicamente mi preocupación surge, porque si bien admitimos criterios objetivos no situados, homologados por la ciencia y sus conocimientos científicos, que clase de información se nos es más próxima cuando se adjudica un valor universalizante a los informes periódicos de los distintos  medios de comunicación y en especial de los noticieros que asumen precisamente ese papel de objetividad encarnada, en ojos que solo muestran cifras y porcentajes, donde son seres humanos no vistos los que están muriendo. Esto me remite directamente al comentario de la profesora cuando trae a colación la cita de Haraway en cuanto a ´´ante que estamos cerrando los ojos´´.
Volviendo al tema de la ponencia, Tania postula varios aspectos que me parece interesantes tratar. En un primer momento (haciendo referencia a la primera parte de su ponencia) tiene que ver con la manera en que según Tania Haraway concibe lo científico desde la visión, haciendo alusión a: ´´estructuras de poder que configuran cánones de lo que es conocimiento y lo que no, de lo que es científico y de lo que no´´. Si bien entiendo, creo que a lo que tal vez quería referirse Tania con este apartado, apunta mas a esa necesidad precisamente de una nueva objetividad feminista como lo expone Haraway y no por el contrario a tomar una postura epistemológica totalizante que de sentido a lo que es o no científico y lo que es o no conocimiento. De tal manera no es tanto a una investigación genealógica si lo podríamos llamar así, a lo que se inclina Haraway sino a una de-construcción de este tipo de conocimientos, precisamente para pensarse otras objetividades; sin embargo, es posible que haya mal interpretado la lectura y pasado por alto otros aspectos, es por esto que me gustaría en la medida de lo posible si se pudiera profundizar más en este punto.
Por otra parte, Tania profundiza creo que, de manera muy precisa, en esas dinámicas de la visión que desea desmantelar Haraway ante las ´´inocentes intenciones del objetivismo científico´´. Por un lado, pone de manifiesto el objetivismo encarnado en su capacidad de posicionamiento universal, de ese ojo mecánico, transformado y adaptado a los intereses hegemónicos de un mercado capitalista y militarizado, para darnos cuenta de que efectivamente todo gira alrededor de la visión, en una retórica aceptada ante lo admisible, lo comprobable, lo observable pero también, de lo que ha sido llamado a permanecer oculto, lo particular, el pensamiento subyugado. y es aquí donde Tania expone un termino que me gustaría pudiera aclararlo, y es cuando habla de los descubrimientos científicos ausentes o independientes de toda lucha. Este concepto de lucha, es el que me genera intriga puesto que no sé si se refiera a esa clase de conquista de saberes colonizados por así decirlo por parte de la ciencia o precisamente a la irrupción de cánones cognitivos ausentes de toda responsabilidad.  


Bibliografía:
Haraway. D. 1995. “Manifiesto para ciborgs: Ciencia, tecnología y feminismo socialista a finales del siglo XX”. En ciencia, 
ciborgs y mujeres. La reivindicación de la naturaleza, Madrid: Cátedra.



martes, 12 de mayo de 2020

Diario 2 (acerca de la lectura de Haraway)

Creo que una de las tantas posibilidades que da este tipo de espacio, es hablar precisamente de manera mas abierta acerca de nuestra experiencia con diferentes tipos de autoras.
Paralelamente y acudiendo a mi honestidad es la primera vez que tengo algún tipo de acercamiento a una lectura feminista, sin embargo, tenía siempre la necesidad de poder debatir en un entorno mas académico las distintas inquietudes que aún me siguen surgiendo con respecto a este tipo de teorías, puesto que considero, nosotrex como pensadorex tenemos un cierto compromiso implícito en la manera de abordar el mundo, no solo desde la academia sino desde los distintos ámbitos de nuestras vidas.
Al encontrarme con este texto de Haraway debo admitir que no fue tan sencillo rastrearlo y entender las intenciones de esta autora, tal vez en parte como lo decía anteriormente dada mi inexperiencia ante este tipo de teorías y mi poca capacidad de interrelacionar conceptos que en un momento no me parecían tan transparentes(en su claridad); como el concepto de ´´tecnologías semióticas ‘o la manera en la que se intentaban inscribir otro tipo de corporalidades y de de-construcciones en esa ´´metáfora de la visión´´ de la que también nos hablaba; me sentía a veces literalmente, en un cuadrilátero de boxeo donde claramente el texto me estaba dando una paliza. 
Después de leerlo reflexione un poco sobre este acontecimiento tan particular y me pareció que esto ocurría porque se nos es difícil desmenuzarnos, hablarnos en otros lenguajes y mirarnos de otra manera a la que nos hemos habituado a hacerlo.  Las incidencias de los conocimientos científicos y el peligro que se desborda al aceptar ciegamente cánones cognitivos como si fuera el cuerpo de cristo, son nociones que no dimensionaba en rango tan amplio ante la destrucción de subjetividades. Es por ello que me ha parecido mas que valioso, fundamental el desbordar los saberes acomodados en los que suele caer la estructura metodológica de contenidos que asumimos en nuestro plan de estudio, no por que no tengan valor o no sean relevantes, sino para hacer lo que también nombraría Foucault como la importancia de un estudio genealógico de distintos saberes

jueves, 7 de mayo de 2020

Co-ponencia 2 ( Camila Torres)


Siguiendo la lectura del capítulo 7 del texto de Haraway : ciencia cyborgs y mujeres. La reinvención de la naturaleza. Camila Torres plantea varios puntos críticos, como la objetividad científica, La metáfora de la visión de la que también habla Haraway en su texto y otros temas que intentare desarrollar más adelante dejando la pregunta abierta, con la intención de que se pueda profundizar en ellos no solo con la intervención de Camila sino también de mis  compañerx.
Haciendo un tránsito por el texto de Haraway, Camila plantea en su ponencia el concepto de objetividad científica tomando como punto de partida primero la definición de objetividad: ´´Se refiere a la aspiración de la ciencia a corresponder al objeto que investiga, mediante procedimientos colectivamente aceptados por los científicos y a condición de evitar la influencia de factores subjetivos´´ y posteriormente, plantea como las intenciones implícitas en este concepto de objetividad por parte del conocimiento científico termina  en una retórica sin ninguna otra intención que la de intimidar con el poder que implica en estos términos la ciencia, alejándose de otro tipo de visiones a las que posteriormente acudirá Haraway en el texto. En este sentido creo que si bien Camila recopila una parte fundamental del texto, Haraway amplia un poco más el panorama ante las intenciones que tiene con el termino de objetividad redireccionando la objetividad feminista en lo que se conjuga en ´´conocimientos situadas´´, es decir, el poder romper con una estandarización del conocimiento, partir de la peculiaridad ante la multiplicidad de perspectivas y visiones, escindirse como lo plantea Haraway de las encarnaciones  tecnológicas estandarizadas para poder apropiarse de otros lenguajes.
Por otra parte, Camila acude en la última parte de su ponencia a la metáfora de la visión expuesta por Haraway y expone como la ciencia y la tecnología moderna han transformado los modos de mirar, de observar y codificar en el lenguaje de la mirada ´´tecnologías de visualización´´ es decir, de inscribir en los cuerpos formas no habitadas, regímenes de la mirada. Es así entonces como se propone en la ponencia, el argumento de Haraway que insiste en la parcialidad de la visión y no de la universalidad esquematizada y suplantada por ideales de realidad refinada maquillada y tecnificada; no obstante, creo que a lo que realmente apunta Haraway no es solo a reinventar otras formas de visión desde la objetividad sino también a  construir unos nuevos cuerpos, a no caer en el ´´heroísmo tecnocientífico´´ y no permitirse las nostalgias del truco divino, de esas tecnologías que nos impulsan a perspectivas de la realidad deshabitadas. De tal manera la metáfora creo que apunta a la peculiaridad, a la parcialidad de cuerpos cambiantes y a su inagotable descubrir y transformar, de poder incluso- como ella misma lo dice- de unirse a otro cuerpo, de remendarse.
En última instancia quisiera dejar este último espacio de mi intervención para plantear algunos conceptos que no me quedaron del todo claros en el texto de Haraway y que espero sea posible en un próximo encuentro entre todex poder aclararlos.
 En el texto Haraway habla de un nuevo tipo de ´´ tecnologías semiòticas´´ con relación a las corporalidades, en este sentido ¿a lo que apunta Haraway es a unas formas de redefinir el cuerpo? o ¿cómo se podrían entender entonces estos conceptos?. Ya para finalizar, en la última parte de la página 336 del capítulo 7 del texto de Haraway ciencia cyborgs y mujeres. La reinvención de la naturaleza. La autora cita a pie de página un concepto desarrollado por una autora llamada Sandra Harding, la cual expone que el género se divide en tres dimensiones: el simbolismo genérico, la división socio-sexual del trabajo y los procesos de construcción de la identidad individual generizada. Siguiendo esta cita no me quedo del todo claro la manera en que se engloban estos términos ante lo que se expone como dimensiones del género, en este sentido agradecería a quien pudiera aclararme la manera en que se relacionan estos términos y de qué manera los adopta Haraway en su texto.

Bibliografia: 
D. Haraway, (1995). ciencia cyborgs y mujeres. La reinvención de la naturaleza. Madrid: Catedra

miércoles, 6 de mayo de 2020

Co-ponencia 1(Angie Daniela Bernal Rico)



Ante lo planteado en la ponencia de la compañera Angie Daniela Bernal Rico, quise ubicar mi intervención haciendo énfasis en dos puntos que considero más relevantes para dar inicio a la discusión.
1)La ciencia como forma de poder
En el segundo punto de la ponencia (conocimientos situados) Angie nos habla de como Haraway interpreta esta figura retórica en la que caen los saberes científicos para codificarlos en una verdad aceptada, es decir para enunciar al mundo un saber objetivo prácticamente indiscutible; Sin embargo, creo que uno de los grandes riesgos al momento de intentar universalizar el conocimiento es caer en lo que Haraway enuncia como ´´reduccionismo´´. Si bien el riesgo es adoptar estos discursos de poder que eliminan a mí a parecer no solo los lenguajes e interpretaciones de culturas como por ejemplo las nativas y ancestrales que no entran en sus ´´canones cognitivos´´ al tener una interpretación del mundo menos positivista, de tal manera creo que lo preocupante  en estas lógicas no es solo la universalidad y el inminente exterminio de las subjetividades, sino el poder de reconocimiento que le hemos dado a la ciencia, lo cual creo que ha estado inmerso incluso  en las dinámicas pedagógicas de las instituciones educativas y en los modelos de formación con que se  fomentan los ideales  de valor productivo para una sociedad globalizada.

2)La importancia del lenguaje
Ubicándome nuevamente en la segunda parte de la ponencia, Angie cita a Haraway «lo que tiene la etiqueta de conocimiento es controlado por los filósofos que codifican la ley del canon cognitivo» (Haraway, p. 314). De manera paralela a lo que también plantea Haraway en el texto, es el lenguaje el código -por decirlo así- o la herramienta fundamental del filósofo para dar rienda suelta al conocimiento que desea intervenir o exponer. En este sentido la importancia del lenguaje no se debe pensar solamente como un artefacto de poder, al caer en el riesgo de adoctrinar un discurso, es decir, como un arma de doble filo cuando es casi imposible que el lenguaje escape de lo político. Sin embargo, en la ponencia se plantea el valor que se le da a la objetividad en comparación al criterio subjetivo: ´´Se entiende el saber objetivo como algo que se basa en hechos reales, en la lógica o en algo que se puede probar y no en algo que se base en creencias propias, en las emociones, sentimientos, en contextos específicos etc. Pues estos últimos permean todo de subjetividad y pierden su validez. ´´. En este sentido ¿qué clase de valor le otorgamos a las emociones?, al parecer los cánones cognitivos establecidos por el ser humano, tienden a alejarse precisamente de eso que también nos hace humanos, de lo que posibilita el arte y otros lenguajes emergentes, de acudir también como dice Haraway  a otras ´´tecnologías semióticas´´ a otras formas de representarse sin terminar desmembrado(a)s en el intento es decir, sin poder reinventarse.
 Sera entonces que el abismo del que nos habla Haraway´´ entre lo que los científicos dicen que hacen y lo que en verdad hacen´´ (Haraway, p. 314), ¿es la imposibilidad de dar crédito a las emociones? Es decir, de poder comprender el mundo desde nuestras afecciones y no desde lógicas universales ya validadas que no encarnan nuestras preocupaciones y representaciones más íntimas en nuestra vida diaria.


Bibliografia: D. Haraway, (1995). ciencia cyborgs y mujeres. La reinvención de la naturaleza. Madrid: Catedra